Una reciente mesa redonda en la conferencia de verano de la Asociación de Condados de Maryland abordó el cada vez más polémico tema del uso de drones por parte de la policía. El diálogo, reportado por Maryland Matters, giró en torno a las ventajas y desafíos que enfrentan las agencias de law enforcement al utilizar vehículos aéreos no tripulados (UAV) para vigilancia y operaciones de emergencia.
El Condado de Montgomery ha iniciado un programa denominado “Dron como Primer Respondedor”, que ya está en funcionamiento en el centro de Silver Spring y Wheaton, áreas identificadas por la alta cantidad de llamadas de servicio relacionadas con robos, agresiones y otros delitos. El teniente Tony Galladora, del Departamento de Policía del Condado de Montgomery, destacó que el programa, lanzado en noviembre de 2023, había respondido a casi 1,100 llamadas hasta el 30 de junio de 2024. Durante la mesa redonda, se discutieron las aplicaciones comunes de este programa.
La concejala del Condado de Montgomery, Dawn Luedtke, apuntó que esta iniciativa de drones, con un coste aproximado de 200,000 euros, tiene el objetivo de optimizar los recursos policiales y mejorar los tiempos de respuesta. “Con una disminución en el número de oficiales en el departamento, el uso de un dron permite a los agentes centrarse en situaciones más serias o asumir otras funciones”, explicó.
Sin embargo, Jay Stanley, analista senior de políticas del Proyecto de Libertades de Expresión, Privacidad y Tecnología de la American Civil Liberties Union, planteó preocupaciones pertinentes sobre las operaciones policiales con drones. Stanley destacó varios problemas clave que las comunidades deben contemplar, subrayando la importancia de la cautela: “Me pagan para ser paranoico y pensar en las maneras en que esto podría salir mal”.
En respuesta a las inquietudes sobre la privacidad, el Condado de Montgomery ha establecido ciertas salvaguardias. Luedtke afirmó: “Las cámaras no se activan hasta que el dron alcanza su objetivo. Mientras está en tránsito, las cámaras miran hacia arriba y permanecen apagadas, una decisión moldeada por la opinión de la comunidad”.
El delegado Luke Clippinger, quien moderó la discusión, sugirió que el uso de drones podría requerir una revisión legislativa en la próxima sesión. Planteó cuestiones legales críticas, preguntando: “¿Qué sucede cuando una empresa de seguridad privada despliega un dron para rastrear a individuos?”
El debate en curso sobre los drones policiales en Maryland refleja un discurso nacional encaminado a reconciliar la seguridad pública con los derechos de privacidad individual. Si bien la implementación de la tecnología de drones puede mejorar significativamente las capacidades de las fuerzas de seguridad, es imperativo establecer directrices robustas y supervisión para mitigar los riesgos de abuso. Las salvaguardias fundamentadas en la comunidad del programa del Condado de Montgomery podrían ofrecer un marco para otras regiones que contemplan iniciativas similares. A medida que la tecnología de drones sigue evolucionando, el compromiso productivo entre las fuerzas del orden, los legisladores y los defensores de los derechos civiles será crucial para equilibrar un policiamiento efectivo con la preservación de la privacidad individual.
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