Un reciente post en el subreddit r/DjiNeo por parte del usuario Gaza4 ha ofrecido un análisis detallado tras la desensambladura del dron DJI Neo, poniendo de relieve las intricacias de su ingeniería. La imagen compartida muestra la estructura interna del dron, revelando un diseño bien optimizado que enfatiza el compromiso del fabricante con la minimización del peso y la maximización de la eficiencia espacial.
Gaza4 señala varias características importantes, incluyendo la integración de la placa base y los controladores de velocidad electrónica (ESC). La unidad de medición inercial (IMU) es notablemente compacta, lo que mejora tanto el ahorro de peso como la fiabilidad al reducir las posibles fallas de conexión. En el centro del marco del dron se encuentra una pequeña placa de control de vuelo principal que probablemente abarca el sistema de control de vuelo, los ESC, la IMU y otros elementos esenciales. Esta integración ejemplifica la pericia de DJI en el arte de la miniaturización.
El sistema de propulsión del dron consta de cuatro motores sin escobillas fijados a un marco ligero. Las hélices de tres palas se centran en la eficiencia de la dinámica de vuelo mientras mantienen el peso total bajo. Además, la incorporación de protectores de hélices en el diseño del marco actúa como una medida estratégica para un mayor ahorro de peso.
En una observación destacable, Gaza4 menciona una cantidad significativa de espacio desaprovechado bajo la placa base y dentro del caparazón principal. Esto podría indicar la previsión de DJI al dejar espacio para futuras mejoras o características.
Construido a partir de un material ligero pero resistente, potencialmente un plástico reforzado o un compuesto de fibra de carbono, el diseño aerodinámico del dron contribuye a su impresionante peso de menos de 250 gramos, registrándose en solo 135 gramos.
Sin embargo, el despiece suscita preocupaciones respecto a la reparabilidad del dron. Según Gaza4, el costo de las reparaciones podría ser prohibitivo, dado el precio de entrada relativamente bajo del dron, que ronda los 499 euros. También señala el uso de tornillos T3 a lo largo del chasis, algunos de los cuales son ocultos, aumentando la durabilidad mientras se preserva una apariencia elegante.
En resumen, la construcción interna del DJI Neo pone de manifiesto una tendencia significativa en la industria de los drones hacia la miniaturización y la eficiencia operativa, aspectos cruciales para cumplir con las regulaciones en diversos países. Esta combinación de ingeniería avanzada y decisiones de diseño cautelosas invita a un debate más profundo sobre el equilibrio entre la reducción de peso y la facilidad de reparación.
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