Singapur ha sido el escenario del lanzamiento del V-Line Pro, un sistema de alimentación por cable específicamente diseñado para el DJI Matrice 400, el dron estrella de DJI para usos empresariales. Este desarrollo, fraguado en colaboración estrecha con DJI, integra el sistema de alimentación directamente al dron, ampliando de forma considerable la autonomía en vuelo sin necesidad de cambiar baterías. Así, los usuarios del DJI Matrice 400 pueden aprovechar misiones de mayor duración sin interrupciones, algo que mejora la eficiencia operacional en sectores exigentes como la inspección industrial, seguridad pública o topografía geoespacial.
El DJI Matrice 400 es una plataforma modular y robusta, capaz de soportar hasta siete cargas útiles simultáneamente, lo que lo convierte en favorito para múltiples aplicaciones profesionales. El sistema V-Line Pro llega para complementar estas capacidades con una alimentación continua mediante un cable que ofrece vuelos prolongados sin comprometer la carga. Esta solución de tethering permite operar el dron en misiones extendidas, revolucionando la idea tradicional de dependencia de baterías limitadas en tiempo.
V-Line Pro y DJI Matrice 400: la combinación perfecta para vuelos extendidos
Weiliang, CEO de Volarious, destaca que la colaboración con DJI fue clave para lograr una compatibilidad total entre el dron y el tether, asegurando que no haya necesidad de hacer paradas a mitad de misión para cambiar baterías. La eliminación de esta limitación maximiza el tiempo efectivo de vuelo y optimiza el uso de la capacidad de carga. El cable puede extenderse hasta 70 metros, una distancia equiparable a la altura de un edificio de 30 plantas, y está fabricado con materiales homologados en aviación para garantizar seguridad y resistencia.
El sistema incorpora un mecanismo inteligente de tensión del cable, con velocidades de bobinado de hasta 7 metros por segundo, que permite movimientos verticales fluidos mientras evita holguras que puedan comprometer el vuelo. Además, el peso total es inferior a 20 kilos y su montaje puede realizarse por una sola persona en menos de dos minutos, lo que es fundamental para despliegues ágiles en el terreno. La integración con DJI Pilot 2 facilita el acceso a parámetros específicos del sistema de alimentación desde la misma interfaz de control del DJI Matrice 400, mejorando la experiencia del operador.
El sistema de seguridad está bien pensado: el software limita automáticamente la altitud máxima en base a la longitud del cable para protegerlo de tensión excesiva durante la operación. Para mantener un rendimiento óptimo en condiciones exigentes, el V-Line Pro cuenta con un avanzado mecanismo de refrigeración, equipado con seis sensores térmicos y nueve ventiladores, lo que garantiza estabilidad y evita sobrecalentamientos. Además, la compatibilidad con estaciones de carga como DJI Power 1000 amplía las posibilidades de alimentación en entornos diversos.
Este tether ofrece un nuevo abanico de usos para el DJI Matrice 400, desde tareas de extinción de incendios y búsqueda y rescate, hasta vigilancia y cobertura en eventos en vivo. Al convertir el dron en una plataforma capaz de mantenerse en vuelo durante largos periodos, el V-Line Pro redefine las misiones que pueden llevarse a cabo, aportando una flexibilidad y operatividad muy valoradas en sectores profesionales. Sin duda, una apuesta sólida para quienes necesitan una autonomía que hasta ahora resultaba inalcanzable.