China está iniciando una estrategia ambiciosa para impulsar su crecimiento económico mediante la creación de un departamento específico dentro de la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma (NDRC) que se centrará en la economía de baja altitud. Esta iniciativa busca aprovechar el rápido desarrollo del sector de vehículos aéreos tripulados y no tripulados que operan por debajo de 1.000 metros. Actualmente, el mercado de drones de baja altitud y movilidad aérea urbana está valorado en 93.000 millones de dólares (unos 86.000 millones de euros) y se proyecta que superará los 137.000 millones de dólares (aproximadamente 129.000 millones de euros) para 2026, según el análisis de CCID Consulting. Es evidente que el gobierno chino está comprometido con esta causa.
Desarrollo y retos en la economía de baja altitud en China
El nuevo departamento se enfocará en la elaboración de planes estratégicos, la formulación de políticas y la identificación de los desafíos que permitan acelerar el progreso en este campo dinámico. Recientes conversaciones facilitadas por el departamento han resaltado la necesidad urgente de actualizar la infraestructura de baja altitud y de implementar sistemas de red inteligentes. Estas mejoras son consideradas fundamentales para fomentar la innovación y optimizar la eficiencia de las operaciones aéreas.
La importancia de la economía de baja altitud ha ganado relevancia este año al ser mencionada por primera vez en el informe de trabajo del gobierno chino. Este reconocimiento refleja la visión a largo plazo del gobierno para promover la aviación general y apoyar las industrias ligadas a la tecnología aérea. Las autoridades de áreas metropolitanas clave como Pekín, Shanghái y Shenzhen están implementando políticas que fomentan el desarrollo de las industrias de baja altitud.
Analistas de la industria prevén que los avances en tecnologías inteligentes, junto a sistemas de gestión mejorados, jugarán un papel crucial en el impulso del desarrollo de la infraestructura y los servicios asociados. Con más de 50.000 empresas actualmente operando en este sector, China se está posicionando como un líder en actividades económicas de baja altitud. Las iniciativas del gobierno tienen el potencial de abrir nuevas vías para la innovación y el crecimiento en los sectores relacionados con la aviación, consolidando aún más el papel del país en el cambiante panorama de la tecnología aérea y la movilidad urbana.
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