El Cuerpo de Marines de Estados Unidos está reforzando sus capacidades en la lucha contra la actividad no autorizada de drones con un contrato significativo que busca desarrollar tecnologías avanzadas en defensa contra estos dispositivos. La Misión del Cuerpo de Marines ha anunciado recientemente un contrato de 400 millones de dólares, que se dividirá entre Invariant, con sede en Huntsville, y Anduril, en California. Esta iniciativa se centra en la creación de un Sistema de Compromiso de Sistemas Anti-Drones, lo que evidencia la importancia creciente de la tecnología anti drones.
El contrato destaca por su estructura de precio fijo y costo más honorarios fijos, permitiendo que cada empresa reciba hasta 200 millones de dólares. Lo más interesante es que este acuerdo se desarrollará hasta octubre de 2031, brindando múltiples oportunidades para avanzar en tecnología a medida que avance el trabajo. El enfoque integral del contrato abarca tanto hardware como software, así como servicios de apoyo, todo necesario para garantizar el despliegue exitoso del sistema anti-drones.
Las órdenes iniciales incluirán unidades de prueba del primer artículo y soporte para la gestión del programa, lo que subraya el compromiso serio del Cuerpo de Marines para asegurar que el sistema esté operativo desde el principio. La cooperación en el desarrollo de estas soluciones críticas de defensa se llevará a cabo en las instalaciones de Invariant en Huntsville, Alabama, y en las operaciones de Anduril en Costa Mesa, California.
Tendencias en tecnología anti drones
Además, el Cuerpo de Marines ha asignado 15,46 millones de dólares de su presupuesto fiscal 2024 para investigación, desarrollo, prueba y evaluación. Esta asignación resalta la urgencia, ya que los fondos deben ser utilizados antes de que finalice el año fiscal. Esta inversión también pone de relieve la creciente importancia de las tecnologías anti drones, impulsada por una mayor conciencia sobre las amenazas que representan los drones descontrolados en entornos militares y sensibles.
Recientemente, el aumento de incidentes relacionados con drones a nivel mundial, desde perturbaciones en aeropuertos hasta preocupaciones sobre espionaje, subraya la necesidad de contar con sistemas efectivas para la detección, seguimiento y neutralización. A medida que se desarrollen estos avances, será fundamental observar si las innovaciones alcanzadas tendrán aplicaciones en sectores civiles. Esta iniciativa actual merece un análisis profundo sobre sus implicaciones para la seguridad pública y la estrategia de defensa en una era cada vez más influenciada por la tecnología de drones. Se invita a los lectores a compartir sus perspectivas sobre esta considerable inversión en capacidades anti drones.