Una comunidad rural en Kentucky enfrenta una creciente preocupación mientras las fuerzas del orden continúan la búsqueda de un sospechoso vinculado a un tiroteo en una carretera que ha dejado a cinco individuos en estado crítico. La caza del hombre ha entrado en su tercer día, con las autoridades desplegando numerosos efectivos, perros de búsqueda y un dron policial equipado con un escáner infrarrojo, según informa The New York Times. La búsqueda se centra en una densa zona forestal cerca de la Interestatal 75, a unos ocho kilómetros al norte de Londres, Kentucky.
El sospechoso, identificado como Joseph A. Couch, de 32 años, está acusado de disparar desde un acantilado hacia la carretera, utilizando un arma de fuego y 1,000 cartuchos de munición que había adquirido legalmente solo unas horas antes del ataque. El tiroteo afectó a al menos una docena de vehículos, causando daños considerables y múltiples lesiones.
Las autoridades confían en gran medida en un dron equipado con tecnología infrarroja para la búsqueda, una herramienta vital para navegar por el complicado terreno. Su capacidad para identificar firmas de calor se considera clave para localizar a Couch, quien se cree que está oculto en la remota zona.
El Capitán Richard Dalrymple de la Oficina del Sheriff del Condado de Laurel destacó las complejidades de la operación, señalando que la localidad está escasamente poblada, lo que complica sus esfuerzos. Sin embargo, las fuerzas del orden han establecido un perímetro alrededor de la zona sospechosa y están utilizando todos los recursos disponibles, incluido el dron, en su búsqueda del sospechoso.
El tiroteo ha impactado profundamente a la población local. Siete condados y varias escuelas independientes en el sureste de Kentucky suspendieron las clases, incluida una universidad comunitaria, como medida de seguridad. Las Escuelas Públicas del Condado de Laurel anunciaron que permanecerían cerradas “por un exceso de precaución”.
Los residentes están siendo instados a tomar medidas de seguridad, como asegurar sus hogares y utilizar iluminación exterior. El alcalde Randall Weddle de Londres, Kentucky, ha llamado a la unidad comunitaria en este tiempo difícil, enfatizando la resiliencia a pesar de no comprender completamente los motivos detrás de tal violencia.
La búsqueda de Couch continúa, con las autoridades descubriendo su pequeña SUV en una colina cerca de la carretera, junto con un rifle AR-15 encontrado a cierta distancia del vehículo. También se localizó un teléfono móvil, aunque su batería había sido retirada. El diputado Gilbert Acciardo confirmó que las cinco víctimas están actualmente estables y se espera su recuperación.
Los funcionarios creen que el tiroteo fue premeditado, aunque es probable que los individuos afectados no fueran objetivos específicos. El motivo exacto sigue siendo esquivo, pero el diputado Acciardo describió a Couch como “comprometido” con sus acciones. Las fuerzas del orden siguen sin estar seguras de si Couch tiene acceso a suministros o armas adicionales mientras se oculta en la naturaleza.
Este incidente pone de relieve el creciente papel de los drones en las prácticas de las fuerzas del orden. Con alrededor de 1,500 departamentos de policía en Estados Unidos que han adoptado programas de drones, se reconoce su potencial como primeros respondedores y herramientas para la conciencia situacional en tiempo real. Sin embargo, el uso creciente de drones en la policía también plantea importantes problemas de privacidad, lo que requiere un equilibrio cuidadoso entre la seguridad pública y las libertades civiles. A medida que la tecnología de drones evoluciona, será crucial establecer políticas claras que regulen su aplicación para proteger los derechos individuales mientras se mejora la efectividad operativa.
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