Nueva Zelanda ha presentado una queja formal ante el Comité Olímpico Internacional (COI) tras un incidente en el que un miembro del equipo canadiense femenino de fútbol habría utilizado un dron para monitorear una sesión de entrenamiento en Saint-Étienne. Esta situación, reportada por ESPN, ha generado un considerable debate a pocos días del estreno del torneo olímpico de fútbol femenino, que enfrentará a ambos equipos.
El lunes, el equipo femenino de Nueva Zelanda detectó un dron sobrevolando su área de práctica. El personal del equipo notificó rápidamente a las autoridades, lo que llevó a la detención del operador del dron, que ha sido confirmado como miembro del personal de apoyo del equipo femenino canadiense. El Comité Olímpico de Nueva Zelanda (NZOC) emitió un comunicado en el que expresa su asombro ante el evento, describiéndolo como un asunto relacionado con la “integridad y la equidad”. Además de presentar una queja ante la unidad de integridad del COI, el NZOC ha solicitado a Canadá que lleve a cabo una exhaustiva revisión del incidente.
Por su parte, Canadá ha manifestado una sorpresa similar. El Comité Olímpico Canadiense (COC) expresó su pesar por la situación, afirmando estar “sorprendidos y decepcionados”. El COC ha extendido disculpas a Nueva Zelanda Football, a las jugadoras afectadas, y al NZOC, y está llevando a cabo una investigación interna sobre el uso del dron.
A medida que avanza la investigación, el COC está coordinando con el COI, el comité organizador de París y la FIFA para determinar los pasos a seguir. Este incidente ha eclipsado el próximo partido entre Canadá y Nueva Zelanda, programado para el jueves en el Stade Geoffroy-Guichard.
Esta controversia subraya las preocupaciones continuas en torno a la privacidad y la deportividad en el ámbito deportivo, especialmente ante la creciente presencia de la tecnología de drones. Si bien los drones han transformado aspectos de la cobertura deportiva y el análisis de entrenamiento, esta situación pone de relieve el potencial para su uso indebido. Es esencial que las organizaciones deportivas establezcan regulaciones claras sobre el uso de drones durante las sesiones de entrenamiento y los eventos competitivos.