La Armada de los Estados Unidos ha mejorado sus capacidades de recopilación de inteligencia y vigilancia en la región de Asia-Pacífico desplegando un segundo avión de vigilancia marítima MQ-4C Triton en la Base Aérea de Kadena en Japón. Este movimiento, junto con la presencia de ocho Reapers MQ-9, significa un avance significativo en la vigilancia de las actividades navieras chinas en la zona, según informa The Eurasian Times.
El 9 de junio, aproximadamente a las 3:40 p.m., el segundo MQ-4C Triton aterrizó en la Base Aérea de Kadena, según confirmó un funcionario del Ministerio de Defensa japonés. El ejército estadounidense tiene previsto estacionar temporalmente dos Tritones en la base de mayo a octubre, junto con aproximadamente 50 personas de apoyo.
La Base Aérea de Kadena, la más grande de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos en la región de Asia-Pacífico, tiene una posición estratégica, estando a solo tres horas de vuelo de Pekín, Seúl y Taipéi. La base es crucial para la defensa de Japón y alberga varios aviones de combate avanzados, como los F-35 Lightning II, F-22 Raptors, F-16s estadounidenses y F-15E Strike Eagles.
La oposición local de la Prefectura de Okinawa y los gobiernos locales ha sido fuerte en contra del despliegue de los Tritones MQ-4C y la presencia continua de drones MQ-9 en la Base Aérea de Kadena. El Consejo de la Ciudad de Kadena ha expresado preocupaciones sobre posibles accidentes de aeronaves debido al creciente número de activos militares estadounidenses estacionados en la base.
El despliegue de los Tritones MQ-4C y los drones MQ-9 en la Base Aérea de Kadena forma parte de los esfuerzos militares de los Estados Unidos para mejorar sus operaciones de vigilancia e inteligencia en la región, con un enfoque en las islas Nansei desde Kyushu hasta Taiwán. Este despliegue es una respuesta al aumento de los desafíos de China a las reclamaciones marítimas de países vecinos en el Mar de China Oriental y Meridional.
A medida que las tensiones persisten en la región, el uso estratégico de drones como el Triton y el Reaper por parte del ejército estadounidense se espera que juegue un papel crítico en la vigilancia de las actividades navieras chinas y garantice la seguridad de sus aliados en la región de Asia-Pacífico. Esto subraya la importancia de los vehículos aéreos no tripulados en las operaciones militares modernas, especialmente en roles de vigilancia y reconocimiento.