El piloto llamado Nigel Wilson ha admitido la culpa de sus diferentes vuelos realizados sin permiso y violando las leyes sobre el control de este tipo de vehículos.
La sanción ha alcanzado las 1.800 libras (unos 2.500€) y, entre los vuelos se encontraban diferentes vuelos a eventos deportivos en diferentes estadios del país y, además, un vuelo cercano a Buckingham Palace, por lo que el delito se ha elevado hasta llegar a la corona. Este suceso recuerda a un incidente similar en Estados Unidos cuando un aficionado volaba su dron por encima de un estadio hasta que cayó.
En este caso, además de la sanción económica, se le ha prohibido la compra o el uso de cualquier dron en dos años, una medida interesante que podría parar a muchos de realizar un vuelo sin conocimiento.
Fuente: BBC
